¿TE IMAGINAS 64 DÍAS SIN SOL? ASÍ ES LA ASOMBROSA NOCHE POLAR EN BARROW, ALASKA
Este 18 de noviembre, en Barrow, Alaska, comenzó un fenómeno natural tan extremo como fascinante: la noche polar. El sol se ocultó a las 4:27 p.m. (hora de México) y no volverá a aparecer hasta el 22 de enero de 2025. Durante los próximos 64 días, esta pequeña población de 5,000 personas vivirá en total oscuridad, enfrentando temperaturas que pueden descender hasta los -25°C.
La noche polar es un fenómeno único del Círculo Polar Ártico, donde, debido a la inclinación de la Tierra, algunas regiones permanecen completamente alejadas del sol durante días, semanas o incluso meses. En Barrow, esto significa dos meses de oscuridad ininterrumpida, un reto constante para sus habitantes que, para mantener sus rutinas diarias, dependen de la luz artificial, el resplandor de la luna y, si tienen suerte, las mágicas auroras boreales.
Este fenómeno no solo ocurre en Alaska. Lugares como Tromsø en Noruega, la estación Amundsen-Scott en la Antártida y Arctic Bay en Canadá también experimentan la noche polar, aunque con duraciones diferentes. En Barrow, la oscuridad será casi total hasta que el sol vuelva a asomarse en enero, justo a tiempo para la toma de posesión de un nuevo presidente de EE. UU.
Durante estos meses de oscuridad, el frío se intensifica y el clima se torna brutal. Aproximadamente una cuarta parte de los días en Utqiagvik (nombre anterior de Barrow) no superan los cero grados Celsius, y el vórtice polar estratosférico, que lleva aire frío descendente desde el Polo Norte, afecta el clima del hemisferio norte.
A pesar de la falta de luz, los habitantes de Barrow están acostumbrados a esta particular forma de vida. En un lugar donde el sol nunca se pone durante el verano, la vida continúa con un ritmo adaptado a la oscuridad. En el solsticio de invierno, el sol estará 4,7 grados bajo el horizonte durante el mediodía, sumergiendo a la región en un crepúsculo azul y violeta que no avanzará más allá del anochecer.
La noche polar es, en muchos sentidos, el opuesto del fenómeno conocido como sol de medianoche, donde el sol nunca se oculta, y la luz solar inunda el cielo las 24 horas del día durante los meses de verano. En Barrow, la oscuridad, al igual que su contraparte, tiene su propio ritmo y belleza, y aunque la temperatura descienda y el cielo se oscurezca, la vida sigue adelante con la ayuda de la luna y las auroras que iluminan el vasto cielo ártico.